sábado, 2 de mayo de 2015

Lightning Bolt - Fantasy Empire

Lightning Bolt es probablemente el dúo que mejor suena de la historia del rock. No estamos ante un álbum más ni ante una banda convencional. Lo de Lightning Bolt, por mucho que pueda englobarse dentro del noise y del punk, no tiene nombre. Un cantante-batería al que no se le entiende y un bajista que, sin quererlo, acaba pareciéndose a un guitarrista, es lo que nos ofrece este par de músicos que llevan dando guerra desde finales de los 90.

¿Qué ha cambiado desde Oblivion Hunter (2012)? Mucho y poco al mismo tiempo. Por una parte, su anterior álbum resultaba bastante experimental, pero nada adictivo. Los temas resultaban muy dispersos para una banda que únicamente pretende hacernos mover el cuerpo. A la vez, este último álbum tiene ingredientes similares a las canciones más cortas y directas. Y es que Fantasy Empire es el disco más accesible y directo de toda su carrera. ¿Debería esto preocupar a sus fans? Todo lo contrario. Es lo mejor que podían hacer.

Fantasy Empire se caracteriza por riffs de bajo dignos de cualquier disco de metal. Si en Prodigy encontramos a punkis haciendo música electrónica, este caso sería el contrario. La progresión de la música podría ser adecuada para cualquier sesión de Dj centrado en hacer romper la pistas de baile. Desde el primer tema The Metal East  nos encontramos con una faceta conocida y, a la vez, poco explotada del dúo: esa en la que nuestro cuerpo no es más que un siervo de los ritmos frenéticos y repetivos de un batería-cantante y un bajista:


Para los que no los conozcan, los directos de Lightning Bolt se llaman directos de guerrilla, por estar situados en medio del público y atacar hacia los espectadores que se ven inmersos en el escenario sin saberlo.



Musicalmente, no hay novedad. No obstante, esta faceta de Lightning Bolt supone un acercamiento al gran público que puede escuchar en ellos a una banda original que no renuncia a un sonido difícil de digerir y sin ningún artificio.

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