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jueves, 16 de abril de 2015

20 sorpresas de 2014 Parte 2/4 Mejores álbumes internacionales

Aquí van 5 agradables sorpresas musicales. Aquí se juntan un grupo que vuelve a sus raíces, otro que lo intenta y lo consigue en parte, un grupazo único que flojea por primera vez, una mujer susurrando mientras toca el piano y un auténtico maestro de la música electrónica:

15.- Slipknot - 5: The Gray Chapter

Con este quinto álbum se confirma la regla de que el sufrimiento se puede transformar en algo positivo si se sabe canalizar.

La muerte del bajista Paul Gray en Slipknot ha sido el eje de este trabajo que supone una mejora desde el decepcionante All Hope is Gone (2008). Si hablamos en serio y sin tapujos, la muerte del bajista no ha tenido tanto que ver en su sonido como la salida del batería Joey Jordison.

Los que conozcan la banda se habrán dado cuenta de que el sonido tira más hacia sus primero álbumes, que se caraterizaban por un sonido bastante cercano al death metal. También hay algo de su tercer largo Subliminal Verses (2004), que supuso un giro total hacia canciones más melódicas y pausadas.

A pesar de que la inmensa mayoría de las letras giran en torno Paul Gray, aquí el protagonista es Corey Taylor. Sin un batería que eclipsaba a la banda, el cantante nos regala sus mejores interpretaciones con unas canciones que, aunque no son las mejores, nos devuelven a unos Slipknot que llevaban mucho tiempo dormidos.




14.- Weezer - Everything will be Alright in the End


Me declaro ultrafan de Pinkerton (1996) y en menor medida del Blue Album (1994). Después de Pinkerton, el power-rock de Weezer tuvo muchas variantes, pero el gancho conseguido con sus dos primeros trabajos rara vez ha sido alcanzado. Everything will be Alright in the End no se puede considerar una obra maestra y tampoco se puede comparar con los discos anteriormente citados. No obstante, si que se puede apreciar una especie de continuación lógica de Pinkerton con un sonido cercano al Blue Album. Aunque hay partes que realmente dan vergüenza (Cleopatra entera, el single Back to the Sack no aguanta ni dos escuchas), los buenos momentos te hacen pensar en ese Weezer que tanto dió en su día. Eso sí, no esperéis letras decentes. Go Away es un precioso dueto con unas rimas que un niño de 5 años encontraría simples:


"So I ask what does she have that I don't have.
So say you're stable then you go away.
That's why I'm telling you to go away."

Go away, go away, go away...




 En fin... muy buen álbum en su mayoría de metraje


13.- Shellac - Dude Incredible



Me declaro fan absoluto de esta banda. Steve Albini es mi productor favorito y todo lo que hace tiene una calidad media que más de uno desearía tener una sola vez en su  vida. Pero este Rey Midas tenía que errar alguna vez. Este es el caso. Si obviamos su primer tema, el que da título al álbum, nos encontramos ante su peor disco. Un álbum bueno a secas, sin mucho que destacar aparte de un sonido más potente.

Eso sí, Shellac ha conseguido su tema definitivo. Quizás no sea el mejor (The End of the Radio podría ser el caso), pero Dude Incredible sí es el que mejor define al trío y el que hace rugir a la manada. Esa batería potente que recrea una tormenta de puños con un bajo atronador y Albini cantando una pelea de borrachos como si fuera la batalla final entre el bien y el mal hacen de  este álbum una joyita que, si bien mejorable, tiene la marca de la casa. Y eso es suficiente. Compruébenlo:





Para mí, el tema del año.

12.- Grouper - Ruins 

Quizás a más de uno este grupo y este álbum le resulte algo más que aburrido. Digamos que directamente puede sonar soporífero. No es mi caso. De hecho, la sorpresa que me supuso este álbum es que, como en un buen libro, podía imaginarme el escenario donde la música fue grabada.

Igual que el Elliot Smith más íntimo, aquí la artista Liz Harris nos transporta a su cuarto o, quizás, a un salón amplio y diáfano. En esa habitación, con su dulce voz y prácticamente la unica ayuda de su piano, nos regala un trozo de su intimidad en formato acústico.

Personalmente, me gusta imaginarme tumbado en un sofá de dicho salón durante la tarde escuchando a esa mujer que, en mi mente, tiene un aire angelical con el pelo rubio. Va vestida con un camisón blanco y toca en un piano de cola. El susurro se oye perfectamente, a pesar de estar en un salón amplio con grandes ventanales en un día soleado de invierno.



Y, musicalmente, ya he comentado que puede sonar demasiado tranquilo. Es un álbum ambiental para degustar con tiempo que acaba enganchando. Si te gusta Elliot Smith y ese rollo de folk alternativo íntimo, este álbum merece la pena de cabo a rabo.


11.- Aphex Twin - Syro


Lo he comentado varias veces aquí y cuando tengo la oportunidad siempre lo repito: no tengo ni puta idea de electrónica. No es que sea un experto en nada, pero sé lo mismo de este género que de mecánica cuántica. De ahí que cuando encuentro un álbum decente la sorpresa es muy agradable y digna de mención.

Aphex Twin es un pionero en lo del IDM (Intelligence Dance Music) y, por lo que he escuchado, este Syro suena muy a los 90. Música que mezcla momentos bailables y movidos con trances creados a partir de un corta-y-pega similar a Boards of Canada, pero más entretenido y rápido

Si buscas electrónica currada, este álbum es muy recomendables. De hecho, es la primera vez que escucho un IDM que va a un ritmo acelerado. Sirva de ejemplo el tema que introduce el disco, que suena como Si Boards of Canada aceleraran el pedal:


martes, 27 de mayo de 2014

Guía rápida para Primavera Sound 2014: jueves 29

Este jueves arranca como es debido el Primavera Sound 2014. Aquí van las bandas que no me perdería por nada del mundo.


A las 17:45 acudiría a ver el grupo de J Grupo de Expertos Solynieve, 45 minutos, de rock alternativo.

A las 19:30 iría de cabeza a escuchar ese gran grupo holandés llamado The Ex. Estamos hablando de un grupo de punks anarquistas que experimentan muchísimo con la música africana. Hace unos años cambiaron significativamente la formación y esto supongo que afectará al repertorio ya que su cantante solo tiene un álbum en nómina. No obstante, la filosofía del grupo no ha cambiado en absoluto y su actitud sigue tan férrea como siempre. Probablemente no falte este tema de su último álbum "Catch my Shoe" (2011):



Nada más terminar dicho concierto, a las 20:45 me pasaría un rato a ver a Los Ganglios, un grupo bizarro español que hace canciones que dan pena y risa a la vez. Si esperas buena música en este concierto es que no sabes donde te metes:



A las 21:40 llega el plato fuerte del día, Neutral Milk Hotel. Ya lo comenté, pero repito que es imprescindible.

Nada más terminar, iría rápidamente a ver a Standstill a las 22:50, simplemente para escuchar la primera canción de dicho grupo y confirmar que ahora cantan mariconadas sin sustancia y que sus buenos tiempos quedaron lejor, por lo que correría para ver a Queens of the Stone Age a las 23:00. QOTSA publicaron el año pasado "Like a Clockwork", un trabajo donde han puesto lo mejor que podían dar y cuenta con excelentes colaboraciones. Si los astros se alinean, puede que Trent Reznor salga a cantar esto:



De este concierto me perdería los últimos 20 minutos porque, joder, a las 00:00 empieza Shellac. Un grupo que acude al festival año tras año y que, por primera vez, trae novedades. Están apunto de publicar su nuevo álbum. Shellac es el grupo de Steve Albini, que es más conocido por su labor de productor. No obstante, como músico es una máquina que no para de hacer obras de arte. En Shellac practica un post-hardcore bastante experimental que no se olvida de dar caña. Yo descubrí a la banda con este tema de su último álbum hasta la fecha "Excellent Italian Greyhound", que seguramente no faltará:



A la 1:00 iría a ver Arcade Fire, aunque empiece a las 0:30. ¿Razón? Las canciones memorables de Arcade Fire las dejan para el final y su último álbum "Reflektor" no merece una segunda escucha. Eso sí, temas como "Neighborhood 1: Tunnels" será uno de los mejores momentos de todo el festival:



Y, después de esto, a domir.

viernes, 23 de mayo de 2014

Guía rápida para el Primavera Sound: Slint y Neutral Milk Hotel

Aquí va otra entrega de este curso intensivo para sacar el máximo provecho al festival Primavera Sound 2014. Los grupos IMPRESCINDIBLES de esta edición son Slint y Neutral Milk Hotel (NMH) y sus álbumes "Spiderland" y "In The Airplane over the Sea"

¿Por qué son imprescindibles? Ambos grupos comparten ciertas características. Son grupos que llevan más de una década sin sacar absolutamente nada y que hacen conciertos de reunión. Las dos formaciones publicaron únicamente dos álbumes y lo dejaron. Eso sí, lo dejaron en el punto más alto. Seguir hubiera supuesto bajar el nivel en cualquier caso. No hablamos de discos tremendos, son discos PERFECTOS en todos los aspectos. Los estilos a los que pertenecen son distintos, pero suponen un punto y aparte en la música. Y, en el caso de Slint, el punto de partida de un estilo.


Empezando por Slint, nos encontramos a los pioneros del post-rock. Allá por 1989 aparece su primera referencia titulada "Tweez", aunque realmente fue grabado en 1987. Este debut está producido por Steve Albini, un productor clave en la historia que ayudó a realizar discos como "In Utero" de Nirvana o "Come on Pilgrim" de los Pixies entre otros. En "Tweez" nos encontramos con una música bastante tosca, como un diamante en bruto. Algunos lo catalogan de post-hardcore, si bien sería su facción más experimental. La música es original, pero no se acerca ni por asomo a lo que estaría por venir. Eso sí, merece mucho la pena escucharlo. Puede que resulte difícil en las primeras escuchas, pero tiene una buena calidad. La formación originiaria de Kentucky se formó con componentes de varias bandas de post-hardcore como Squirrel Bait o The Anomoanoan y tras su separación darían lugar a bandas como Tortoise, The For Carnation o King Kong.


"Spiderland" aparece dos años después en 1991. Si bien hay otros álbumes que hicieron historia este año como "Nevermind" o "Loveless", Slint entregaron la obra maestra del comienzo de la década. Con solo 6 temas nos sumergen en un viaje en el que una hamalgama de estilos y sonidos tan diferentes como la psicodelia, el rock, el hardcore y la experimentación en general confluyen a la perfección. Estructuras complejas con cambios de ritmo, repetición, letras enigmáticas ("Don Amar" o "Good Morning, Captain") y, ante todo, pasión son algunos de los ingredientes de este plato para gourmets.

"Spiderland" está compuesto por un engranaje que crea una máquina perfecta donde todo está medido a la perfección. Su osadía musical lo fue tanto que dio el pistoletazo de salida a todo un subgénero del rock que sigue vigente hoy en día, no fue flor de un día como el shoegazing o el grunge. Una de las principales diferencias entre Slint y las bandas actuales del mismo estilo es que Slint tiene un cantante, mientas que el post-rock suele ser instrumental. En "Spiderland" la música es acompañada por un cantante que, si bien no tiene una voz espectacular, trasmite como ninguno. Tiene un voz rota que intenta no forzar utilizando varias veces spoken word, hablar en vez de cantar. Y las letras acentúan muchísimo toda la música, si bien dichas letras no tienen un sentido o significado concreto en varias ocasiones. Los estallidos en su música también son algo común, pero hay ocasiones en que la mecha se moja y el resultado es igualmente espectacular.

 Los 6 temas del álbum están a un nivel muy alto, pero como muestra os dejo "Good Morning, Captain" y "Nosferatu Man":




He visto varios directos de la banda y lo bueno es que suelen tocar "Spiderland" prácticmante en su totalidad, pero su directo puede decepcionar a algunos. No es que toquen mal, es que lo hacen exactamente igual que en el álbum y su escenografía en el escenario es quedarse quietos en el sitio. No obstante, con los temas de "Tweez" la cosa mejora mucho. Personalmente, me gusta ir a un concierto y que la música suene bien y tal y como se grabó en estudio, pero entiendo que haya gente que espere algo más.


En el otro lado tenemos a Neutral Milk Hotel. La banda de Jeff Mangum es un grupo que practica el folk-rock con tintes de folk y con un sonido pop. También se les ha incluido dentro del movimiento lo-fi (baja fidelidad). Si bien no entiendo bien este último concepto, debo decir que escuchar el álbum a tratar es lo más cercano que uno puede escuchar a estar en un estudio. Producción simple, pero impecable.

En 1996 aparece su primer álbum "On Avery Island". Al igual que el grupo anterior, su debut es un esbozo de lo que estaba por venir. Si lo comparamos a su continuación, este trabajo es también más tosco. Las melodías no son tan pegadizas, la psicodelia está más acentuada y el sonido es más crudo. En algunas ocasiones suena incluso infantil.

Luego vino la gloria con "In the Airplane over the Sea". Este disco perfecto vio la luz en 1998. Mucho se ha escrito sobre la temática de las letras. Este álbum conceptual trata temas como el amor, la felicidad, la pérdida, la adolescencia... temas universales a través de una historia con varias incógnitas. El compositor Jeff Mangum estaba inmerso en historias de la cultura europea y una buena parte de los seguidores de NMH afirma que es Anna Frank la mujer de la que hablan. Si bien encaja perfectamente con las letras, esto no está confirmado.

La música que se nos presenta es delicada como la voz que la acompaña. El cantante está en estado de gracia y no necesita más que desnudarse emocianalmente ante el micrófono para ofrecernos toda una variedad de emociones como la alegría, la nostalgia, el dolor o el amor. Desde el comienzo ya nos sumerge en un mundo en el que la bondad y la crueldad se muestran a partes iguales. La parte más amable la encontraríamos en temas como el que da título al álbum o "The King of Carrot Flowers Part One", mientras que la parte amarga aparece en los 8 minutos de "Oh Comely" o "Two Headed Boy Part Two". Sin importar el tono, nuestros pelos se ponen de punta varias veces en los menos de 40 minutos del álbum.

Tenemos de protagonista principal a este cantante que trasmite tanto pronunciando frases de gran riqueza lírica como simples "Di di di di...", pero tenemos a muchos secundarios que con sus apariciones esporádicas enriquecen todo este ambiente. Trompetas, guitarras acústicas, órganos, trombones, gaitas y muchos instrumentos de viento da una riqueza de matices perfecta para que este folk suene poderoso cuando lo precisa, pero también hay momentos en los que únicamente una persona lleva todo el peso y su sencillez nos demuestra toda su alma (si es que existe tal cosa).

Los temas que recomiendo para empezar son el que da título al álbum y los 8 minutos de "Oh Comely":




En el caso de NMH el directo es un plus. Intentan sacar un sonido parecido al álbum y, por suerte, no suelen conseguirlo. Esto le da otro matiz totalmente distinto a la música, que se ve más desnuda aun y la emoción que emana Jeff Mangum es contagiosa. Suelen tocar el álbum en casi su totalidad y en esta gira está acompañado de la banda original. En el Primavera Sound preveo mucha piel de gallina con según que temas.